Empiezan las charlas. Empieza el reflejo. Es fuerte el espejo.
El sistema del arte contemporáneo es una red compleja e intrincada. La maravilla de esta residencia es que estamos concentrados varios actores de distintos ángulos de esta red conociendo algunos agentes de la escena local, generando un diálogo íntimo y cotidiano entre partes que pocas veces se tocan. Se trata de sentarnos a escuchar.
Hoy hablamos de cómo está construida la relación entre públicos, creadores e instituciones. Primero con la directora y el coordinador de una escuela de fotografía, Fábrica de Imágenes y después con el director del Centro Cultural Clavijero.
Salgo de este día con preguntas en torno a la educación ¿en qué espacios y con qué estrategias se involucra a la comunidad de manera viva? ¿En qué instancias el público en general es capaz de dialogar con el arte contemporáneo?
Corroboro la necesidad de trabajar en la educación visual de niñxs y jóvenes en dinámicas que se vinculen con la experiencia dentro de la comunidad. Visualizo el trabajo que hago como el de una araña que teje hilos que comunican lo especializado con lo cotidiano, ampliando el círculo central de esta red compleja.
Y mientras tanto al interior del hostal, la red de cada uno se enriquece y los círculos se abren.